Existe un lugar único en el
mundo, que fue construido por una sola persona, Leonard Knight, el cual
transformó una colina del desierto de California, en una instalación artística
alucinante.
Durante más de treinta años, este
hombre fue creando, con sus propias manos, murales de adobe (barro y paja)
superpuestos, y cubriéndolos con toneladas de pinturas multicolor,
transmitiendo un mensaje de paz y amor, y sobre todo de amor a Dios,
importantísimo para él.
La estructura se compone por
muchas partes entrelazadas, una escalera que va a dar a una gran cruz en la
parte más alta, pequeñas galerías conectadas que hacen las funciones de salas
de exposición, museo… Todo adornado con simbología sencilla: corazones, flores,
hojas, geometrías varias, mensajes de la biblia… “god is love”
En la actualidad Leonard K. se
encuentra ingresado en un hospital geriátrico, y gracias a la trascendencia que
ha tenido este lugar, se ha conservado ante muchas adversidades con la ayuda de
voluntarios y turistas. Esperemos que
siga en pie mucho tiempo, y poder tacharlo de la lista de sitios a los que ir…y
quizás algún día esa luz de Dios nos salude.
ángelita
Hay fanáticos que sí molan. Todo muy psicodélico.
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